Líquidos biológicos, análisis
Las pruebas de laboratorio pueden realizarse, además de en sangre, en diversos fluidos del organismo. A menudo, el análisis de estos fluidos proporciona más información que la propia sangre; esta información es útil para conocer lo que puede estar sucediendo en una parte u otra del organismo.
Entre las pruebas realizadas en fluidos biológicos más frecuentes se incluyen:
- Urianálisis
- Estudio del semen
- Prueba del sudor
- Fibronectina fetal
- Líquido amniótico, análisis
- Líquido cefalorraquídeo, análisis
- Líquido sinovial, análisis
- Líquido pleural, análisis
- Líquido pericárdico, análisis
- Líquido peritoneal, análisis
Las muestras se suelen obtener recogiéndolas en un contenedor (por ejemplo, orina o semen) o bien introduciendo una aguja en una cavidad orgánica y aspirando posteriormente con una jeringa parte del fluido (por ejemplo, líquido cefalorraquídeo, líquido pericárdico, etc.).
Una vez obtenida la muestra, pueden realizarse en ella distintas pruebas (bioquímicas, genéticas, examen microscópico y pruebas microbiológicas).
En algunos casos, como para el líquido pleural, pericárdico y peritoneal, es importante determinar si se trata de un trasudado o de un exudado, para poder identificar mejor la enfermedad o el trastorno subyacente.
Trasudado
- Ocasionado por la pérdida de equilibrio entre la presión del interior de los vasos sanguíneos (que favorece la salida de fluido) y la cantidad de proteínas en sangre (que favorece la retención de líquido en los vasos sanguíneos)
- Se trata de un fluido claro con una baja concentración de proteínas y un número limitado de leucocitos
- Puede hallarse en situaciones como insuficiencia cardíaca congestiva y cirrosis
Exudado
- Ocasionado por lesión y/o inflamación
- Su contenido en proteínas está aumentado y puede ser turbio debido al elevado número de células que pueden estar presentes
- Puede observarse en infecciones, procesos malignos (cáncer metastásico, linfoma, mesotelioma) o en enfermedades autoinmunes