10.07.2020
La inmunidad frente al coronavirus está siendo investigada por diversos grupos de investigadores en distintas partes del mundo y sigue siendo en parte un misterio. Esta claro que no todas las personas expuestas al SARS-CoV-2 sufren la enfermedad (COVID-19); muchas de ellas no se infectan y otras lo hacen de forma asintomática o muestran una sintomatología muy leve. A modo de ejemplo, en el crucero Diamond Princess, en el que el virus probablemente se propagó libremente a través del aire acondicionado que une los camarotes, tan solo se infectaron el 20% de los pasajeros y la tripulación.
Los estudios de seroprevalencia indican que tan solo un 5-7% de la población ha adquirido inmunidad mediada por anticuerpos. Sin embargo, estudios recientes señalan que muchas personas podrían presentar una inmunidad, ya sea innata o adquirida, no detectable a través de las pruebas de anticuerpos.
Es más que probable que haya factores genéticos que condicionen la susceptibilidad y gravedad de la infección por el SARS-CoV-2. De hecho, se demostró que las personas con grupo sanguíneo A tienen más riesgo de gravedad de la COVID-19 y se han hallado genes de riesgo genético, tal como los del locus 3p21.31 del cromosoma 3.
Por otro lado, no hay que olvidar que la inmunidad adquirida no solo está relacionada con los anticuerpos, sino que existe también la llamada inmunidad celular. Los anticuerpos los producen los linfocitos B y su función es neutralizar directamente al virus. Sin embargo, la inmunidad celular esta mediada por los linfocitos T que se producen en el timo y están programados para reconocer, responder a y recordar antígenos (de virus, por ejemplo) y constituyen una parte fundamental del sistema inmunitario destruyendo directa o indirectamente las células infectadas, que actúan como fábricas para los virus.
Los resultados del estudio realizado por el Karolinska Institutet y el Hospital Universitario Karolinska de Estocolmo apuntan a la inmunidad celular como factor protector en las personas con afección leve o asintomática. Estos autores analizaron 200 personas que tenían síntomas leves y sus familiares asintomáticos, así como donantes de sangre sanos que se utilizaron como controles. Los pacientes con COVID-19 leve y muchos de sus familiares asintomáticos expuestos presentaban linfocitos T programados para combatir este virus, incluso sin haber dado positivo en la prueba de anticuerpos.
Aún más, el 30% de los donantes de sangre que se usaron como controles tenían linfocitos T específicos de COVID-19. De ser esto cierto, la inmunidad poblacional podría ser mucho mayor que lo que sugieren las pruebas de anticuerpos; los autores hablan de como mínimo el doble. Este estudio está actualmente en el repositorio de artículos científicos bioRxiv pendiente de la revisión por otros investigadores. Sin embargo, apenas genera dudas porque se trata de un grupo de trabajo muy sólido y lo respalda una de las instituciones más prestigiosas del mundo.
La inmunidad celular podría explicar por qué las personas jóvenes tienen más probabilidades de generar inmunidad, ya que la reserva de células T programables disminuye con la edad. Es difícil, sin embargo, establecer la inmunidad celular a nivel poblacional porque requiere una tecnología mucho más compleja que la que se emplea para la detección de anticuerpos y que solo se utiliza en el ámbito de la investigación. También falta por establecer la duración de la inmunidad adquirida, tanto la celular como la mediada por anticuerpos.
Además de las diferencias individuales relacionadas con la genética, el medio ambiente y las relaciones interpersonales también afectan a la tasa de transmisión y, por tanto a la expansión de la pandemia. Para acabar definitivamente con ella es necesario alcanzar una inmunidad colectiva elevada y para asegurar que esto se logra sigue siendo primordial disponer de una vacuna eficaz y al alcance de todos.
Bibliografía
Karolinska Institutet. Immunity to COVID-19 is probably higher than tests have shown. Disponible online en
https://news.ki.se/immunity-to-covid-19-is-probably-higher-than-tests-have-shown. Último acceso el 7 de julio de 2020.
ConSalud.es. Asocian los factores genéticos y el grupo sanguíneo A con un mayor riesgo de infección por COVID-19. Disponible online en https://www.consalud.es/pacientes/especial-coronavirus/asocian-factores-geneticos-grupo-sanguineo-riesgo-infeccion-covid-19_81423_102.html. Último acceso el 7 de julio de 2020.