También conocido como: PSA total, PSA libre, PSA ligado
Nombre sistemático: antígeno prostático específico
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para detectar el cáncer de próstata, para evaluar la indicación de realizar una biopsia de próstata, para valorar la efectividad del tratamiento del cáncer de próstata o para detectar una recidiva del cáncer de próstata.
¿Cuándo hacer el análisis?
Cuando un paciente presenta signos o síntomas que sugieran la presencia de cáncer de próstata, como tener la micción dificultosa, dolorosa o más frecuente de lo habitual. También se puede solicitar a intervalos regulares, durante y después del tratamiento del cáncer de próstata. En los pacientes asintomáticos, se puede solicitar siempre y cuando el paciente esté correctamente informado sobre las implicaciones y beneficios de la prueba. Para más información, consultar las recomendaciones del cribado en adultos (de 30 a 49 años) y en adultos mayores de 50 años.
¿Qué muestra se requiere?
La determinación se realiza a partir de una muestra de sangre venosa del brazo.
¿Es necesario algún tipo de preparación previa?
Se recomienda evitar la eyaculación en las 24 horas previas a la prueba, ya que se asocia a un aumento del PSA. Evitar ejercicio extenuante como el ciclismo. Ciertas medicaciones y productos de herboristería también pueden aumentar la concentración de PSA, por lo que se debe informar al médico acerca de cualquier medicamento, con y sin receta, que se esté tomando en el momento de la extracción. La muestra debe recogerse previamente o varias semanas después de la realización del tacto rectal o de una biopsia de próstata, ya que estas pruebas también elevan la concentración de PSA.
¿Qué es lo que se analiza?
El PSA es una proteína sintetizada principalmente por las células de la próstata, una glándula que rodea a la uretra masculina, encargada de fabricar un fluido que forma parte del semen. La mayor parte del PSA sintetizado por la glándula se libera con este fluido, pero una pequeña parte llega a la circulación sanguínea. En la sangre, el PSA se encuentra en dos formas distintas: libre (no unido a proteína) y unido (formando un complejo proteína-PSA). La prueba más habitual es la detección del PSA total, que mide la suma de PSA libre y de PSA unido a otras proteínas.
El PSA se utiliza como un marcador tumoral que permite la detección y seguimiento del cáncer de próstata. Se considera que su utilidad en el cribado del cáncer de próstata en los varones asintomáticos debe realizarse siempre y cuando el paciente esté correctamente informado acerca de las implicaciones de los resultados. Las concentraciones elevadas de PSA se asocian al cáncer de próstata, pero también se observan en los casos de prostatitis y en la hiperplasia benigna de próstata. Además, las concentraciones del PSA tienden a aumentar con la edad.
El PSA no es una prueba diagnóstica del cáncer de próstata. La prueba de elección para el diagnóstico del cáncer de próstata es la biopsia de próstata, que se efectúa recogiendo pequeñas muestras de tejido prostático e identificando las células anormales al microscopio. Un resultado elevado del PSA puede ir seguido de la realización de una biopsia, la cual tiene riesgo de asociarse a complicaciones como el dolor, fiebre, presencia de sangre en la orina o infección del tracto urinario. Para más información sobre las biopsias, consultar el artículo sobre anatomía patológica. El PSA total y el tacto rectal se utilizan en combinación, para evaluar la necesidad de practicar una biopsia.
Una vez que se detecta la presencia de un cáncer de próstata mediante la biopsia, es necesario valorar la necesidad del tratamiento. El cáncer de próstata es relativamente habitual en los hombres de edad avanzada, pero muchos de los casos, por no decir la mayoría, son de crecimiento muy lento. A pesar de que el cáncer de próstata es la segunda causa de muerte en varones, estas variantes de crecimiento lento es raro que produzcan la muerte y muchas veces ni siquiera producen síntomas. El patólogo es el responsable de establecer el diagnóstico y diferenciar entre las variantes de crecimiento lento y las de crecimiento más agresivo y por lo tanto de elevada capacidad metastásica (capacidad de invadir y extenderse a otros órganos).
El sobrediagnóstico y el exceso de tratamiento son problemas que actualmente acaparan el interés médico. En algunos casos el tratamiento puede ser peor que la enfermedad en sí, pudiendo causar efectos colaterales, como la disfunción eréctil e incontinencia urinaria. La prueba del PSA y el tacto rectal pueden detectar la mayoría de los cánceres de próstata, pero generalmente no pueden predecir el curso de la enfermedad en un individuo determinado. La determinación de PSA libre se puede realizar en ocasiones para valorar si un PSA ligeramente elevado precisa de la realización de biopsia.
Preguntas comunes
¿Cómo se utiliza?
Para detectar el cáncer de próstata, la determinación de PSA total y el tacto rectal se solicitan independientemente de la presencia o ausencia de signos o síntomas. En la sangre, el PSA se encuentra en 2 formas, libre y unido a proteínas. Cuando el médico solicita la prueba del PSA se refiere al PSA total, que es la suma de ambas fracciones.
La mayoría de las sociedades científicas recomiendan la determinación de PSA como cribado del cáncer de próstata en los varones asintomáticos, siempre que se informe correctamente a los pacientes del significado y las implicaciones del resultado, para que puedan dar su consentimiento informado.
El PSA total puede elevarse de forma temporal en diversas situaciones. Ante un resultado elevado de PSA, el médico puede solicitar una segunda determinación unas semanas después, para confirmar que dicha elevación no fue transitoria. Si el resultado del PSA vuelve a estar elevado, el médico puede solicitar determinaciones seriadas para valorar si la concentración de PSA se mantiene estable o tiene tendencia ascendente o descendente. En el caso de que el aumento sea aparentemente lento, el médico puede decidir, siempre de acuerdo con el paciente, entre realizar un seguimiento de la enfermedad o bien establecer un tratamiento inmediato. Este procedimiento se denomina “vigilancia activa”.
En el caso de que el tacto rectal sea normal, pero el PSA esté moderadamente elevado, el médico puede solicitar la determinación del PSA libre para evaluar el cociente entre PSA libre y PSA total. De esta forma se puede distinguir entre un cáncer de próstata y otras causas no cancerosas de elevación del PSA.
Si se diagnostica un cáncer de próstata, el PSA total puede utilizarse en el seguimiento para determinar la eficacia del tratamiento. También se puede solicitar de forma seriada, a intervalos regulares, para detectar posibles recidivas del cáncer.
¿Cuándo se solicita?
En el caso del cribado del cáncer de próstata con el PSA en los varones asintomáticos, se recomienda realizarlo en las personas mayores de 50 años y con una esperanza de vida superior a los 10 años.
En el caso de tener algún riesgo asociado, como la presencia de antecedentes familiares de cáncer de próstata, se recomienda comenzar el cribado entre los 40 y 45 años de edad. Para más información, consultar los artículos sobre el cribado en adultos (30 a 49 años) y en adultos mayores de 50 años.
La determinación de PSA y la realización del tacto rectal deberían solicitarse cuando el paciente presente signos o síntomas que podrían deberse a un cáncer de próstata, como dificultad o dolor al orinar, aumento de la frecuencia urinaria, dolor de espalda o dolor pélvico.
Si el PSA total se encontrara elevado, el médico solicitará la repetición de la prueba unas semanas después, para verificar si su valor se ha normalizado.
El PSA libre se suele solicitar cuando el PSA total se encuentra moderadamente elevado. Este resultado proporciona información adicional al médico, para saber si el paciente presenta o no un riesgo elevado de padecer un cáncer de próstata, y le ayudará para decidir si debe indicar la realización de una biopsia de próstata.
El PSA total puede solicitarse a intervalos regulares durante o tras la finalización del tratamiento, siguiendo la metodología de la “vigilancia activa”.
¿Qué significa el resultado?
Los resultados se deben interpretar en función de diferentes factores y los límites de decisión pueden variar entre los distintos laboratorios.
- En muchos casos se considera normal una concentración de PSA total inferior a 4,0 ng/mL (nanogramos por mililitro de sangre), con esa concentración es raro que el paciente tenga un cáncer de próstata. Sin embargo, ciertos profesionales creen que este valor debería fijarse en 2,5 ng/mL para poder detectar más casos, mientras que otros argumentan que esto provocaría un exceso en el diagnóstico y por lo tanto el tratamiento de cánceres sin significación clínica.
- Existe el acuerdo de que los varones con un PSA total por encima de 10,0 ng/mL presentan un riesgo mayor de padecer cáncer de próstata.
- Las concentraciones entre 4,0 ng/mL y 10,0 ng/mL pueden indicar la existencia de cáncer de próstata, hiperplasia benigna de próstata o prostatitis. Estos trastornos, al igual que los aumentos moderados de PSA, son más comunes en las personas de edad avanzada. Las concentraciones de PSA comprendidas entre 4,0 ng/mL y 10,0 ng/mL se conocen comúnmente como la “zona gris”. En este rango de valores el PSA libre es más útil.
- Los tumores prostáticos generalmente producen más PSA unido a proteínas que PSA libre. Por otra parte, las células tumorales benignas producen más proporción de PSA libre. Por lo tanto, en los varones con resultados de PSA total en la zona gris y con concentraciones bajas de PSA libre, el riesgo de padecer un cáncer de próstata es mayor. Si los valores de PSA libre son elevados, el riesgo es menor. El cociente entre PSA libre y PSA total ayuda al médico en la decisión de realizar o no la biopsia de próstata.
Para mejorar la utilidad clínica del PSA total como herramienta de cribado se pueden evaluar los resultados en diferentes aspectos:
- Valores de referencia de PSA estratificados por edad: como los valores de PSA tienden a aumentar con la edad, se ha propuesto que los valores de referencia se ajusten según la edad del varón.
- Velocidad con la que varían los valores de PSA: si los valores de PSA aumentan significativamente a lo largo del tiempo (como mínimo en 3 muestras en un período mínimo de 18 meses), es más probable que exista un cáncer de próstata. Si el aumento es muy marcado es posible que el cáncer sea más agresivo.
- Tiempo de duplicación de los valores del PSA: se trata de una variante del anterior que mide la rapidez con la que la concentración de PSA se duplica.
- Densidad de PSA: comparación entre la concentración de PSA y el volumen de la próstata (obtenido por ecografía). A mayor tamaño de la próstata, mayor tendencia a producir más cantidad de PSA. Si la concentración de PSA es más alta de lo que se podría esperar según el tamaño de la próstata, la probabilidad de que exista un cáncer será mayor.
La concentración de PSA tendría que disminuir durante el tratamiento del cáncer de próstata. Al final del tratamiento debería de haberse reducido a concentraciones indetectables o muy bajas. Si la concentración no disminuye, se debe a que el tratamiento no ha sido totalmente efectivo. Después del tratamiento, la concentración de PSA se sigue evaluando a intervalos regulares para detectar la posible aparición de recidivas. Cualquier cambio de concentración, por pequeño que sea, puede resultar muy significativo, por lo que lo más adecuado es medir siempre el PSA en el mismo laboratorio para reducir la variabilidad al máximo.
¿Detecta el PSA todos los cánceres de próstata?
No. Algunas células cancerosas prostáticas no sintetizan PSA y la prueba será negativa a pesar de que exista un cáncer.
¿En qué consiste el índice de salud prostática?
El índice de salud prostática es una prueba que combina los resultados del PSA total, PSA libre y proPSA. Su resultado permite calcular las probabilidades de una persona de tener un cáncer de próstata y precisar la realización de una biopsia en los casos en que el PSA total está elevado, pero el tacto rectal es negativo.
¿En qué consiste la isoforma p2PSA?
Esta prueba mide la concentración de la isoforma del PSA denominada p2PSA. Permite predecir el riesgo de cáncer de próstata y la necesidad de biopsia en los pacientes con elevación del PSA total. Esta prueba también permite identificar las variantes agresivas del cáncer de próstata. La combinación de los resultados de la prueba del p2PSA y el PSA total y libre ha mejorado la sensibilidad y especificidad del diagnóstico del cáncer de próstata en los últimos años.
¿Qué otras pruebas se pueden realizar en pacientes con un PSA ligeramente elevado para valorar si existe cáncer de próstata?
Aunque el PSA permite predecir la presencia de un cáncer de próstata, en ocasiones produce resultados falsos positivos, especialmente cuando está ligeramente elevado. La biopsia que sigue a un resultado positivo de PSA puede causar incomodidad o ansiedad y tiene riesgo de complicaciones. A medida que estas pruebas estén disponibles en más centros, pueden ayudar a la toma de decisiones médicas:
- PCA3: se trata de una proteína producida únicamente en la glándula prostática. La prueba mide la concentración en orina del ARN mensajero que activa la fabricación de la proteína PCA3. El aumento de la producción de este ARN mensajero (sobreexpresión) es un evento típico de las células del cáncer de próstata.
- [-2] proPSA: se trata de un precursor del PSA que lo producen en mayores cantidades las células del cáncer de próstata que las células prostáticas sanas o benignas. El porcentaje de [-2] proPSA respecto al PSA total, al igual que el porcentaje de PSA libre, permite tomar decisiones sobre la indicación de realizar una biopsia.
- Fusión TMPRSS2-ERG: esta prueba también se realiza en orina y detecta el ARN mensajero producido a partir de este reordenamiento genético. Este reordenamiento está presente en más del 50% de los cánceres de próstata, por lo que una concentración alta del ARN mensajero es indicativa de la presencia de un cáncer.
Ninguna de estas pruebas permite realizar un diagnóstico definitivo de cáncer de próstata ni descartar su presencia. Una biopsia positiva sigue siendo el "patrón oro" para el diagnóstico del cáncer de próstata. Estas pruebas son herramientas para predecir si el uso de la biopsia estaría indicado para establecer el diagnóstico.
¿Qué pruebas se pueden realizar para valorar si un cáncer de próstata va a ser agresivo y por tanto se debería extirpar en lugar de vigilar?
- Clasificación de Gleason: suele formar parte del informe del patólogo tras el análisis de la biopsia del cáncer de próstata. Describe el grado en el que aparecen ciertas características de las células cancerosas que están asociadas a un peor pronóstico.
- Perfil de expresión génica: esta prueba analiza el cáncer presente en la biopsia mediante técnicas moleculares para determinar el grado de activación de ciertos genes asociados a mal pronóstico.
- Fusión TMPRSS2-ERG: esta prueba se realiza en orina y, además de tener valor como indicador de la necesidad de realizar una biopsia, también permite predecir el comportamiento del tumor.
Aunque la clasificación de Gleason se realiza en todos los cánceres de próstata que se biopsian, las otras pruebas aún se encuentran en investigación. En general, es complicado saber si un cáncer de próstata crecerá rápido y se expandirá por el organismo o bien será un tumor de crecimiento lento que probablemente no cause la muerte del paciente. Por esta razón es tan importante la decisión de realizar un cribado con PSA y la subsiguiente biopsia.
¿En qué consiste el PSA ultrasensible?
Esta prueba podría ser mucho más útil que el PSA para vigilar la persistencia o la recurrencia del cáncer de próstata después del tratamiento. El PSA ultrasensible permite detectar el PSA a concentraciones mucho menores que la prueba tradicional, de tal modo que pequeños aumentos de PSA podrían detectarse más precozmente. No obstante, estos resultados deben interpretarse con cautela, ya que la elevada sensibilidad de la prueba se asocia a mayor número de falsos positivos.
¿Hay algo más que debería saber?
En algunos varones, los valores del PSA pueden incrementarse temporalmente debido a ciertas situaciones que afectan a la próstata, principalmente las infecciones. En un estudio reciente se ha demostrado que casi la mitad de los hombres que tienen un PSA elevado, normalizan los valores al cabo de un tiempo. Algunos expertos recomiendan que el análisis del PSA se repita entre 6 semanas y 3 meses después de la primera determinación antes de la toma de decisiones. Algunos médicos prescriben antibióticos si existe evidencia de una prostatitis.
Enlaces
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En otras webs:
Asociación Española de Pacientes con Cáncer de Próstata (AESPCAP)
Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM): Cáncer de próstata
Asociación Española contra el Cáncer (AECC): Cáncer de próstata
Instituto Nacional del Cáncer (NIH): Análisis del antígeno prostático específico (PSA)
American Cancer Society (ACS): Cáncer de próstata
También conocido como: HSV-1, HSV-2, HHV1, HHV2, VHS, herpes oral, herpes labial, herpes genital
Nombre sistemático: virus del herpes simple tipo 1 y tipo 2
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para hacer un cribado o un diagnóstico de la infección por el virus del herpes simple (VHS).