También conocido como: Retinol
Nombre sistemático: Retinol
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para detectar un déficit o un exceso de vitamina A.
¿Cuándo hacer el análisis?
Cuando se presentan signos o síntomas de un déficit o exceso de vitamina A; cuando existe riesgo de presentar un déficit.
¿Qué muestra se requiere?
La determinación se realiza a partir de una muestra de sangre venosa.
¿Es necesario algún tipo de preparación previa?
Es necesario realizar un ayuno previo, y no debe tomarse alcohol durante las 24 horas anteriores al análisis.
¿Qué es lo que se analiza?
La vitamina A es una vitamina liposoluble que está presente de forma natural en muchos de los alimentos que comemos. La principal forma de vitamina A en la especie humana es el retinol. Esta prueba mide la concentración de retinol en sangre.
La vitamina A es un nutriente esencial para una visión correcta, el crecimiento e integridad de la piel, la formación ósea, el sistema inmunitario, y el desarrollo embrionario. Es necesaria para la formación de fotorreceptores en los ojos y para mantener el revestimiento de la superficie de los ojos y otras membranas mucosas. El déficit de vitamina A pueden afectar la visión nocturna, causar daños visuales, y en casos graves, conducir a ceguera. Un exceso agudo o crónico de vitamina A puede ser tóxico, causando síntomas varios, y en algunas ocasiones defectos de nacimiento.
El organismo no tiene la capacidad de sintetizar vitamina A, por lo que las concentraciones en el organismo dependen de fuentes dietéticas. Las fuentes animales aportan vitamina A (en forma de retinol) mientras que los vegetales y la fruta aportan caroteno (una sustancia que puede convertirse en vitamina A en el hígado). La vitamina A se almacena en el hígado y en tejidos grasos (es una vitamina liposoluble) y los adultos sanos pueden llegar a disponer de una cantidad almacenada equivalente a las necesidades anuales. El organismo mantiene una concentración en sangre relativamente estable gracias a un mecanismo de retroalimentación o feedback que libera la vitamina A almacenada a medida que se necesita, al mismo tiempo que aumenta o disminuye la eficiencia de su absorción a partir de las fuentes dietéticas en función de las necesidades.
El déficit de vitamina A es muy poco frecuente en países desarrollados, pero constituye un problema de salud importante en muchos países en vías de desarrollo, donde los alimentos son limitados para un gran número de personas. Uno de los primeros signos asociados al déficit de vitamina A es la ceguera nocturna, y según la Organización Mundial de la Salud los niños y las embarazadas son los más afectados.
Los déficits de vitamina A principalmente se observan en casos de malnutrición, en diarreas crónicas, en desórdenes de la absorción como la enfermedad celíaca, la fibrosis quística, o la pancreatitis crónica, así como en ancianos, en casos de alcoholismo, y en casos de enfermedad hepática y obstrucción de los conductos biliares. La cirugía a nivel intestinal o pancreático tiene consecuencias similares.
La deficiencia de vitamina A es un factor de riesgo de sarampión grave; el tratamiento con vitamina A puede acortar la duración del trastorno y puede reducir la gravedad de los síntomas y el riesgo de muerte.
La toxicidad por vitamina A generalmente se produce por el uso excesivo de suplementos vitamínicos. Sin embargo, en algunas ocasiones puede producirse cuando la dieta incluye una alta proporción de alimentos ricos en vitamina A, como el hígado.
Preguntas comunes
¿Cómo se utiliza?
La determinación de vitamina A se utiliza como ayuda en el diagnóstico de un déficit de vitamina A cuando una persona presenta síntomas como ceguera nocturna, o en personas con enfermedades que afectan a la absorción intestinal de nutrientes y que presentan un riesgo de presentar déficit de vitamina A. Sin embargo, la determinación generalmente no se realiza con este objetivo, puesto que el déficit de vitamina A en España es muy poco frecuente. En ocasiones, la prueba puede solicitarse para detectar concentraciones tóxicas originadas por la ingesta de grandes cantidades de vitamina A.
¿Cuándo se solicita?
La determinación de vitamina A puede realizarse cuando una persona presenta signos y síntomas que sugieren un déficit de vitamina A, o existe una malnutrición general. Entre los signos y síntomas que pueden aparecer se incluye:
- Ceguera nocturna.
- Sequedad de los ojos, piel y cabello.
- Úlceras y daños a nivel de la córnea, la capa más externa del ojo que cubre el iris y la pupila.
- Hiperqueratosis de la piel y lesiones cutáneas.
- Manchas grisáceas en el revestimiento de los ojos (manchas de Bitot).
- Infecciones de repetición.
- Anemia.
Las pruebas se pueden realizar periódicamente cuando se tiene una enfermedad asociada con la malabsorción de nutrientes, como:
- Enfermedad celíaca.
- Síndrome del intestino irritable.
- Enfermedad de Crohn, un tipo de enfermedad inflamatoria intestinal.
La determinación de las concentraciones de vitamina A puede realizarse periódicamente cuando una persona presenta signos y síntomas sugerentes de toxicidad por vitamina A, y la historia médica coincide con el consumo de alimentos o suplementos vitamínicos con vitamina A. Algunos de los signos y síntomas asociados con toxicidad por vitamina A incluyen:
- Dolores de cabeza.
- Náuseas y vómitos.
- Visión doble o borrosa.
- Fatiga.
- Debilidad.
- Mareos.
- Convulsiones.
- Irritabilidad.
- Dolores musculares.
- Dolores en huesos y articulaciones.
- Pérdida de peso.
- Pérdida de pelo.
- Sequedad de las membranas mucosas.
- Picazón.
- Alteraciones hepáticas.
- Lesiones en forma de grietas en las comisuras de la boca.
- Inflamación de la lengua (glositis).
¿Qué significa el resultado?
Las concentraciones de vitamina A en sangre dentro del rango terapéutico indican que la cantidad de vitamina A es suficiente, pero no indican la cantidad almacenada en la reserva. El organismo mantiene concentraciones de vitamina A en sangre relativamente constantes hasta que las reservas se han agotado.
Las concentraciones de vitamina A en sangre por debajo del rango terapéutico indican que se han agotado todas las reservas y que la persona presenta un déficit. Esto puede provocar ceguera nocturna, entre otras complicaciones.
Las concentraciones de vitamina en sangre por encima del rango terapéutico indican que se ha excedido la capacidad de almacenamiento del organismo y que en sangre existe un exceso de vitamina A, pudiéndose depositar en otros tejidos, causando toxicidad. Obtener demasiada vitamina A, generalmente de suplementos o ciertos medicamentos, puede causar mareos, dolores de cabeza y náuseas. En casos graves, puede provocar coma y poner en peligro la vida. En las mujeres embarazadas, demasiada vitamina A puede provocar defectos de nacimiento del bebé.
¿Hay algo más que debería saber?
Aunque las cantidades almacenadas de vitamina A sean muy pequeñas, estas pueden ser suficientes excepto si se presenta una enfermedad o estado, como el embarazo, que conlleva unas demandas superiores. Esta es la principal razón por la que, en muchas partes del mundo, la ceguera nocturna es frecuente en mujeres embarazadas.
El consumo excesivo de alimentos que contienen caroteno (como las zanahorias), puede provocar un cambio en el color de la piel (amarillo-naranja), pero sin causar una toxicidad por vitamina A. El organismo no convierte el caroteno en vitamina A cuando la cantidad de vitamina A es suficiente.
¿Cuáles son las fuentes alimenticias de vitamina A?
Las fuentes de vitamina A preformada incluyen la carne (especialmente el hígado), los huevos, productos lácteos y alimentos fortificados.
Las fuentes de caroteno (principalmente β-caroteno) incluyen frutas y verduras de colores brillantes como zanahorias, espinacas, albaricoques, boniato y melón.
¿Cuáles son las raciones diarias recomendadas de vitamina A?
En adolescentes y adultos a partir de los 14 años, las raciones diarias recomendadas (RDA por su siglas en inglés) son de 900 microgramos (3.000 IU) para hombres y 700 microgramos (2.310 IU) para mujeres. Las recomendaciones para otros grupos, como bebés, niños y mujeres embarazadas, varían. En estos grupos, puede consultar la lista aportada por la National Institutes of Health (NIH) Office of Dietary Supplements.
¿Cuál es el tratamiento en caso de déficit de vitamina A?
Los déficits leves y moderados de vitamina A se tratan con suplementos y/o modificaciones de la dieta. Los déficits más graves pueden requerir la administración supervisada de dosis terapéuticas de vitamina A.
¿Puede realizarse la determinación de vitamina A en la misma consulta médica?
No, este análisis requiere profesionales experimentados e instrumentación específica. No todos los laboratorios realizan estas pruebas por lo que es posible que la muestra se envíe a un laboratorio de referencia.
Enlaces
Pruebas relacionadas:
Estados fisiológicos y enfermedades:
En otras webs:
Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA): VItamina A
Familydoctor. Vitaminas y Minerales: Cómo obtener lo que usted necesita
National Institutes of Health (NIH). Office of Dietary Supplements: Vitamin A and Carotenoids
También conocido como: HSV-1, HSV-2, HHV1, HHV2, VHS, herpes oral, herpes labial, herpes genital
Nombre sistemático: virus del herpes simple tipo 1 y tipo 2
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para hacer un cribado o un diagnóstico de la infección por el virus del herpes simple (VHS).